El proceso de pelar una alcachofa es, para qué os voy a engañar, engorroso. Afortunadamente, la paciencia y esfuerzo se ven ampliamente recompensados por el resultado final: el corazón de la alcachofa. El nombre parece puesto con toda la intención del mundo. Me gusta comer este guiso en dos “vuelcos”: por un lado las alcachofas con las verduras, y por otro el caldo que resulta de la cocción. Si no se come como plato único, es el acompañamiento perfecto para un pescado a la plancha.
INGREDIENTES PARA DOS PERSONAS
- Alcachofas 4 uds
- Cebolla 1 ud
- Hinojo 1/2 ud
- Zanahoria 2 uds
- Ajo 1 diente
- Vino blanco 1/2 vaso
- Caldo de verduras o pollo
- Hierbas frescas (romero, tomillo, laurel etc.)
- Agua
- Aceite de Oliva Virgen Extra
- Sal
PREPARACIÓN (Tiempo aproximado: 60 minutos)
> Preparamos los ingredientes: pelamos las alcachofas hasta quedarnos con el corazón, que conservamos en un bol con agua y el zumo de medio limón (hay muchos vídeos en YouTube que enseñan cómo pelar una alcachofa); pelamos la cebolla y la cortamos en rodajas finas; retiramos las hojas del hinojo y lo cortamos en rodajas finas; pelamos las zanahorias y las cortamos en rodajas finas; pelamos el ajo y lo cortamos en dados pequeños.
> En una olla pequeña, o cazo grande, añadimos un chorro generoso de aceite de oliva y, a fuego medio, rehogamos el hinojo, la cebolla y la zanahoria durante 5 minutos. Hay que remover continuamente para que no cojan color.
> Transcurridos los 5 minutos, añadimos el ajo, los corazones de alcachofa enteros y salamos.
> A continuación, añadimos medio vaso de vino blanco seco, dos vasos de caldo y dos vasos de agua. Añadimos también las especias frescas (las que tengamos a mano).
> Llevamos a ebullición y cocemos a fuego medio-alto durante 30 minutos.
> Terminada la cocción, los corazones de alcachofas deben quedar tiernos y se deben poder atravesar con un tenedor sin resistencia.
> Este plato se puede preparar el día de antes, o incluso el fin de semana para consumir a lo largo de la semana.