La despensa junto a los frescos hacen la combinación perfecta para cocinar todo tipo de recetas.

Básicos en la despensa

Pastas, arroces y legumbres:

Básicos que no pueden faltar en ninguna despensa. Son la base de infinidad de recetas y su caducidad es muy amplia por lo que podrás comprarlos en grandes cantidades o formatos y que te duren meses.

Harinas:

Para casi cualquier elaboración dulce casera se necesita la harina. Puedes escoger la que más te guste entre la harina integral, la harina de almendra, la harina de garbanzo... o tener varias para diferentes elaboraciones.

Conservas:

Ya sean de verduras o legumbres te facilitarán mucho tus elaboraciones rápidas del día a día. Las conservas de pescado son imprescindibles para ofrecer un buen aperitivo a tus amigos o familia.

Mantén tu despensa ordenada

Un buen consejo es mantener la despensa lo más ordenada y con los productos lo más a la vista posible para que no se queden olvidados durante meses o incluso años y finalmente se tengan que tirar. Puedes utilizar botes de cristal para los alimentos secos (legumbres, pastas, arroces..) ya que es mucho más fácil identificarlos y tenerlos siempre a mano. Otro consejo es ordenarlos según tipos de alimentos para localizar de manera rápida lo que buscas.